El agua ayuda a estructurar tejidos y articulaciones por eso tenemos que tomar mínimo dos litros al día.
Puedes distribuirla así: una o dos horas antes del entrenamiento tomar aproximadamente medio litro, durante el entrenamiento un litro en lapsos de cada 15 minutos y al finalizar otro medio litro.
El efecto de no tomarla se le llama deshidratación y nos trae varios efectos como : fatiga, naúseas, palpitaciones más aceleradadas y una lenta recuperación.
Un tip para saber si estas deshidratado o hidratado es de color es tu pipí, porque mientras más clara sea más hidratado estás; y mientras más obscura sea más deshidratados estás.
En conclusión, nuestro cuerpo está compuesto por un 60% de agua repartido entre órganos, músculos y huesos. Todos conocemos la importancia del agua para el mantenimiento de la vida, pero no siempre somos conscientes de lo importante que esto cuando practicamos deporte.